Debo reconocer, que mi opción favorita son las patatas a la importancia. Si no las has probado nunca, ¡ya estás tardando!
INGREDIENTES (para 4 personas):
Patatas: 800 gramos.
Cebolla: una.
Panceta fresca de cerdo: 150 gramos.
Huevos: 4.
Tomates: 2.
Laurel: 2 hojas.
Vino blanco: 100 mililitros.
Pimiento morrón asado: 3.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal.
Para la picada:
Ajo: 2 dientes.
Almendras tostadas: 30 gramos.
Azafrán: 3 hebras.
Perejil: una ramita.
Pan frito: 2 rebanaditas.
ELABORACIÓN DE LAS PATATAS A LA PASTORA (tradicional):
Pela las patatas, lávalas, sécalas y córtalas en trozos chascándolas. Pela la cebolla y pícala. Trocea la panceta. Pica los pimientos y los tomates pelados.
En una cacerola, pon un poco de aceite de oliva y sofríe la cebolla. Cuando esté tierna, añade la panceta y rehoga brevemente. Echa las patatas y rehógalas. Cubre las patatas con agua y echa el vino blanco. Añade a la cacerola los pimientos, los tomates y el laurel y cocina las patatas a fuego lento hasta que estén tiernas.
Mientras se hacen las patatas, cuece los huevos. Una vez cocidos, pélalos y trocéalos.
Ahora, prepara la picada: fríe dos rebanadas de pan en aceite de oliva. Ponlas en el mortero junto con los dientes de ajo picados, las almendras, el perejil y el azafrán. Machácalo todo.
Cuando las patatas estén hechas, añade los huevos y la picada a la cacerola. Deja que de un hervor y sirve.
ELABORACIÓN DE LAS PATATAS A LA PASTORA (Crock-Pot):
Pela las patatas, lávalas, sécalas y córtalas en trozos chascándolas. Pela la cebolla y pícala. Trocea la panceta. Pica los pimientos y los tomates pelados.
En una cacerola, pon un poco de aceite de oliva y sofríe la cebolla. Cuando esté tierna, añade la panceta y rehoga brevemente. Echa las patatas y rehógalas. Echa el vino blanco y mantén la cacerola al fuego hasta que se evapore el alcohol. Pasa todo a la olla lenta.
Añade los pimientos, los tomates y el laurel y cubre todo con agua. Cocina todo durante 4 horas en temperatura alta.
Mientras se hacen las patatas, cuece los huevos. Una vez cocidos, pélalos y trocéalos.
Ahora, prepara la picada: fríe dos rebanadas de pan en aceite de oliva. Ponlas en el mortero junto con los dientes de ajo picados, las almendras, el perejil y el azafrán. Machácalo todo.
Cuando falte media hora para que termine la cocción, añade los huevos y la picada.






Tienen muy buena pinta. Estos guisos empiezan a apetecer ya con el frío que se nos está viniendo encima ¡Besos mil!
Sí, muy propio para estos días 🙂 Pero, que quieres que te diga, ¡ya iba tocando!
Un besazo :*
Una recetwa divina y deliciosa!!besos
¡Muchas gracias!