
Reconozco que mis croquetas favoritas son las de jamón, pero como eso de tirar comida está muy feo siempre aprovecho los restos de carne que quedan después de hacer sopa para hacer unas croquetas.
Hace años que di con la receta ideal para que la bechamel quede en su punto y no la cambio. Porque cuando intento innovar ocurren cosas como os contaba en la receta del hojaldre relleno.
INGREDIENTES para hacer unas croquetas de pollo:
Para el relleno:
Restos de carne.
Para la bechamel:
Leche entera: un litro.
Mantequilla: 100 gramos.
Harina: 100 gramos.
Nuez moscada: una pizca.
Para el rebozado:
Huevos.
Pan rallado.
ELABORACIÓN:
Con un cuchillo picamos los restos de carne en trozos pequeños. Reservamos.
Preparamos la bechamel:
En un cazo ponemos a calentar la leche.
Mientras tanto, en una olla grande derretimos la mantequilla. Cuando la mantequilla está líquida añadimos la harina cucharada a cucharada.
Cada vez que echemos una cucharada de harina tendremos que rehogarla bien en la mantequilla ayudándonos con unas varillas. Es muy importante que esté bien integrada en la mantequilla antes de echar la siguiente.
Una vez que hayamos terminado con la mantequilla echamos la carne picada. Removemos un poco, no hace falta demasiado porque la carne ya está cocinada.
A continuación echamos la leche que tenemos caliente. Aquí también es importante echarla poco a poco. Yo hecho un chorro y remuevo bien con las varillas. Cuando la masa está homogénea añado otro chorro de leche.
Cuando hayamos terminado con la leche añadimos la nuez moscada y la sal.
Ahora toca remover mientras se va cociendo. Mantendremos la cocción hasta que la bechamel se despegue de las paredes de la olla o hasta que no sepa a harina cruda.
Pasamos la bechamel a una fuente grande donde la dejaremos enfriar.
Formamos las croquetas de pollo:
Cuando esté fría es el momento de hacer las croquetas. Para mi lo más sencillo es coger una porción con una cuchara y con las manos limpias y secas. Cuando están todas formadas las pasamos por huevo batido.
Cuando hemos pasado todas por el huevo las pasamos por pan rallado. Aquí podemos aprovechar para mejorar la forma si no nos han quedado muy bonitas.
Para freírlas necesitamos una sartén con abundante aceite de oliva virgen extra. Cuando el aceite esté muy caliente (sin que llegue a humear o si tenemos un termómetro de cocina cuando el aceite esté a 180ºC) las freímos hasta que estén doradas y las dejamos en un coladora para que se escurra el aceite.
Con lo que me gustan a mi las croquetas, y estas tienen una pinta deliciosa!!
Gracias Mai 🙂 Cuantos días sin leerte!