Mi experiencia con el confitado se reduce a la naranja confitada que preparo para el roscón, así que me basé en esa receta . La diferencia es que el jengibré lo confité en la olla lenta.
INGREDIENTES:
Jengibre: un trozo.
Agua: 84 mililitros.
Azúcar: 168 mililitros.
ELABORACIÓN del jengibre confitado:
Lava y seca el jengibre. Córtalo en rodajas de un centímetro de grosor. Echa en la Crock-Pot el agua y 56 gramos de azúcar (1/3 de la cantidad total) y déjalo 1 hora en temperatura alta. Pasada la hora, mete el jengibre y cocina durante 1 hora en bajo. Apaga la Crock-Pot y deja que repose durante 8 horas.
Pasadas las 8 horas, añade otros 56 gramos de azúcar, enciende la Crock-Pot 1 hora en alto y otra hora en bajo. Apaga y deja reposar 8 horas. Repite la operación por tercera y última vez.
Como es un proceso de más de 24 horas, es una buena idea empezar a hacerlas por la noche. A la mañana siguiente hacemos la segunda cocción, por la tarde la tercera y por la noche las sacamos del almíbar.
Yo utilicé todo el jengibre en el momento, así que no se cuantos días aguantará. Supongo que bastantes, por la cantidad de azúcar de la preparación. El almíbar resultante se puede conservar en un tarro de cristal en la nevera.
Ten en cuenta que el jengibre tiene que estar siempre sumergido dentro del agua con azúcar. Así que si vas a hacer mucha cantidad de jengibre confitado, duplica (o triplica) las cantidades de agua.





