Pasta «Alfredo»

La pasta Alfredo recibe su nombre por la salsa que la acompaña, creada en Roma en 1917 pero que en la actualidad es más conocida en los restaurantes italianos de Estados Unidos que en Italia (fuente: Wikipedia).

A mi plato de pasta Alfredo le añadí una yema de huevo curada que había preparado unos días antes 😊 Pero no hace falta que la prepares si no te apetece. También lleva un poco de trufa rallada que tenía perdida en la cocina. Aprovecho para confesar que no me gusta nada el sabor de la trufa, jijiji. 

INGREDIENTES (para 4 personas):

Macarrones: 400 gramos.

Ajo: 2 dientes.

Mantequilla: una cucharada.

Harina de trigo: una cucharada.

Leche: 300 mililitros.

Queso crema: 2 cucharadas.

Queso parmesano: 200 gramos.

Perejil.

Yema de huevo curada: una.

ELABORACIÓN de la pasta Alfredo:

En un cazo pon la leche a calentar a fuego medio.

En una cacerola pon agua a hervir para cocer la pasta. Cuando rompa a hervir echa la pasta y déjala hasta que esté a tu gusto.

Mientras se hace la pasta, pica los dientes de ajo, ralla el queso parmesano y pica el perejil.

En una cacerola calienta la mantequilla a fuego medio, cuando esté derretida echa el ajo picado y dóralo, con mucho cuidado para que no se queme. Añade la harina y remueve bien para que se integre en la mantequilla.

Vete añadiendo la leche caliente poco a poco, como cuando preparas una salsa bechamel. Una vez que hayas echado toda la leche, pon el queso crema y remueve para que se mezcle. Después, haz lo mismo con la mitad del queso rallado.

Escurre la pasta recién cocinada y echa encima la salsa.  Reparte el queso rallado que habías reservado y espolvorea el perejil picado. Termina el plato colocando unos trocitos de la yema de huevo curada. Puedes poner un poco de trufa rallada si tienes a mano.